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1/21/2015

UNA ROTONDA EN LA AUTOPISTA DEL SONIDO

Luego de tres años de su última visita, los Foo Fighters emprendieron viaje hacia la ciudad de las diagonales y llevaron a los fanáticos a toda velocidad a través de su historia.
Fotografia propiedad de  Cristian Estaurino



Domingo 18 de diciembre  en el Estadio Único de La Plata. La gente soportaba las condiciones climáticas porque la pasión era más fuerte. Los chicos que venían de todas partes del país ya habían hecho amistades en  cada uno de los transportes que desembocaban rambla de la calle 32. Allí esperaban con ansiedad  y nuevos amigos mientras las horas pasaban y la lluvia los sorprendía en mitad de la cola.
Las puertas abrieron a las 16 hs y pasadas las 18 hs comenzó el show de Eruca Sativa. El power trió conformado por Lula Bertoldi en guitarra, Brenda Martin en bajo y Gabriel Pedernera tocó sus temas más enérgicos para calentar los motores: Fuera o Mas Allá, El Genio de la Nada, Paraíso en Retro, Para que Sigamos Siendo, Antes que Vuelva a Caer, Agujas, Magoo, Queloquepasa y Desdobla. El público los ovacionó por su  habitual energía y no solo se ganaron nuevos fans, sino que cumplieron el sueño de abrir para los Foo, una de sus grandes influencias. A las 19 fue el turno de los ingleses Kaiser Chiefs que dejaron sorprendidos a todos con la inyección de nitro aplicada principalmente por parte del vocalista Ricky Wilson  que corría de un lado al otro del escenario preparando la garganta de cada uno de los presentes para lo que vendría mas tarde, con  los clásicos Everyday, Average,Ruffians, Never Miss a Beat, Coming Home, Pinball Wizard, Cannons, Ruby, Riot,Misery Company y Oh My God.

Y ahora si, a las 21 hs se oscureció el estadio y los Foo Fighters pusieron primera llevando a los argentinos por el  recorrido que comprendía paradas nuevas de su último disco Sonic Highways como  Something from nothing, In the Clear, Congregation y los clásicos The Pretender, Learn to Fly, Breakout, Arlandria, Generator, My hero, Hey Johnny Park!, Monkey Wrench, I’ll Stick Around y Walk. Dentro de la primera parte del show hubo una ronda de solos en la que los miembros mostraron sus habilidades a modo de competencia  según dijo Dave Grohl, para demostrar que no se sentían intimidados por la potencia de los fanáticos locales y desembocó en una zapada de clásicos como Wrathchild, I'm the One, Another One Bites The Dust, Stairway to Heaven and Tie Your Mother Down que dio paso al momento en que el baterista Taylor Hawkins tomó el volante con  su tema Cold Day in the Sun cambiando la dinámica de show y dándole la oportunidad a sus fanáticos de escucharlo cantar mientras toca la batería.

Pero también tuvo sus momentos tranquilos, en donde se podía ver el panorama como por ejemplo durante Monkey Wrench donde se dibujó en todo el estadio un cielo estrellado formado con las luces de los celulares; un paisaje digno de recuerdo en el mirador que fue creado improvisadamente por la banda. Otro momento mágico fue durante la sesión acústica de Grohl y Rami Jaffee en acordeón, en la que se aproximaron al extremo de la gran pasarela que  atravesaba el estadio y junto con el público cantaron Skin and Bones, Wheels y Times Like This. Sin nada que envidiarle a los recitales europeos o americanos fue digno de recordar, no solo por la sublime y frágil intimidad lograda entre un hombre y 50.000 mil personas sino que luego de salir del túnel que se había formado, el panorama dejó boquiabierto a más de uno que se encontró con la banda ascendiendo sobre una plataforma giratoria en medio del camino y una fiesta de covers que volvió a aumentar la velocidad de cada uno de los presentes.

La banda integrada por Dave Grohl en voz y guitarra, Chris Shifflet y Pat Smear en las segundas guitarras, Nate Mendel en bajo y Taylor Hawkins en batería, anunció el honor de tener dos invitados dignos de levantar en el camino Jonny Kaplan y  Dave Krusen que tocaron I Miss You y fueron parte de uno de los covers mas bailados y cantados de la noche. Además recorrieron otros clásicos como Detroit Rock City, Young Man Blues, Stiff Competition (con Dave Grohl en la batería y Hawkins en la voz) y Under Pressure.

Para terminar el gran viaje sónico de tres horas cerraron con los bises All My Life, These Days, Outside, Best of You y el himno Everlong. El recorrido había llegado a su fin y ambas partes estuvieron a la altura de las circunstancias. La banda dejo muy en claro que va a volver al país que lo conquistó desde su primera visita en el 2012 y los fans los van a estar esperando porque se fueron más que conformes, aun así sabiendo, que les esperaba un viaje mucho más largo y arduo para volver a sus casas. 

CREER EN EL ROCK AND ROLL OTRA VEZ

Luego de tocar en el Estadio Único de La Plata como invitados de Foo Fighters, Jonny kaplan and the Lazy Stars nos brindaron un show a puro rock en el Roxy Live presentando su nuevo disco Sparkle and Shine tras su segunda visita al país.
   Foto por cortesía de Frederico Samarane

La noche era joven en la puerta de Niceto vega al 5542 y se respiraba un ambiente de amistad en el verano de la noche porteña. Gente de todas las edades asistió al bar con viejos conocidos para escuchar la cátedra que tenían para dar los Lazy Stars sobre el verdadero rock americano, y esa tarea fue levada a cabo con éxito.  A las 23 hs los presentes fueron invitados por la banda a ahondarse en sus raíces traídas directamente de los desiertos californianos, siempre dispuestos a aprender sobre nuestras costumbres formando una fusión perfecta entre la calidez natural del sonido que producen y la pasión característica de los argentinos que resultaba totalmente compatible.

El grupo conformado por Jonny Kaplan en voz y guitarra, Kevin Haaland en guitarra, Jokin Salaverria en bajo, Dave Krusen en la batería y Rami Jaffee en los teclados, envolvió el lugar con una gran gama de estilos clásicos  que iban desde el característico rock and roll gasolinero, pasando por baladas folk  hasta incluso ásperos blues que fueron parte de un setlist de 9 temas: Hidden Treasure, Damaged, Annalea, Helena’s Afraid, Still Lonely, When You’re Down, I’ll be Around, Child is Gone, Ride Free , todos ellos ambientados con las imágenes de su reciente viaje al tigre que complementaban a la perfección el mensaje de unión y hermandad que pregonaban desde el corazón hacia estas tierras.

Luego llegaron los invitados locales Henry Donati en la mandolina y la steel guitar y Paul Gallinato en la guitarra que se unieron a la banda para tocar algunos clásicos de la historia del rock como Bang a Gong de T Rex, Mary Jane Last Dance de Tom Petti, Cinnamon Girl de Neil Young, Breakdown de Jack Johnson y  los temas I Miss You y Wild Horses de los Stones. El público y la banda hablaban un solo idioma que era la el de la música y el mensaje que transmitían era: “El rock no está muerto”. Evoluciona y se agranda en este mundo cada vez más estrecho y globalizado en donde las fronteras se acortan para esta gran familia que comparte ese amor por preservar un arte que despierta emociones y transmite ideologías desde los años sesenta.

Por último después del show, comenzó el dj set del Rama Quesada que descontroló a los fans de Foo Fighters presentes ya que puso a todo volumen clásicos de la banda, que había tocado el día anterior en la ciudad de La Plata, y que no solo despertó la nostalgia en los fans ya que Rami Jaffee también tecladista de los Foo, salió a saltar con los chicos haciendo esa noche inolvidable para todos que después de semejante show volvieron a sus casas creyendo en el verdadero rock and roll otra vez.