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4/18/2016

PUNK ROCK IS NOT DEAD



Durante 25 años, Sonic Iguana se especializó en grabar punk y es el primer estudio específicamente construido para ese propósito. En todo ese tiempo produjo cerca de 300 discos de punk internacional generando buenas expectativas en los catálogos de reconocidos sellos discográficos de la escena como Lookout, Fat Wreck Records, Asian Man entre otros. Se dedicó a grabar, mezlcar y masterizar bandas como Rise Against, Anti-Flag, Alkaline Trio, Screeching Weasel, The Lillingtons, Teen Idols, the Smoking Popes, Common Rider, the Queers, the Groovie Ghoulies, Squirtgun, One Man Army, Toxic Reasons, the Huntingtons, y muchas más. También el área de producción contó con leyendas como Billie Joe Armstrong de Green Day, Mike Kennerty de All-American Rejects, Kris Roe de The Ataris, John Strohm de The Lemonheads y Paul Mahern, conocido productor de Iggy Pop.

Después de decir tantos nombres tiro la siguiente pregunta: ¿Por qué se hace tanto hincapié en las bandas que fueron parte de este estudio? La respuesta es el punto central de la columna, ya que Massimiliano "Mass" Giorgini, el dueño de este estudio, también es bajista y fundador de la banda Squirtgun, originaria de Lafayette Indiana. Una vida dedicada al punk, arriba del escenario, abajo con el público y dentro de un estudio que hoy, a causa de terribles condiciones climáticas se vio deteriorado y necesita ser restaurado cuanto antes para preservar los equipos de la humedad, polvo o ¡ incluso un derrumbe!
Algunos de los daños causados en Sonic Iguana.

¿Por qué es importante darle una mano? Bueno, además de ser parte de una  buena acción, no solo es preservar el trabajo y el futuro del estudio, sino que estaríamos restaurando también, las agrietadas bases de la escena punk, que se encuentra en peligro de extinción por las nuevas corrientes musicales y la industria que hace oídos sordos ante los gritos de ayuda de un género que alguna vez supieron aprovechar para su beneficio. Por otro lado y tal vez sea el motivo principal, con la perpetuidad de estos estudios independientes se puede pasar la antorcha a nuevos sellos y sobre todo bandas under que sigan enriqueciendo la cultura mundial.

La siguiente pregunta es: ¿Cómo se puede ayudar? Entrando a: https://www.kickstarter.com/projects/912734450/save-sonic-iguana y donando con el monto que se pueda para ayudar a que el estudio este en estado funcional. ¿Qué significa esto? Significa que si bien se pide un total de  29.000$ (dólares) este monto tal vez sirva para restaurar lo mínimo e indispensable, que es la infraestructura. Por otro lado Mass solo desea que el estudio esté en condiciones básicas, ya que su objetivo no es sacar un beneficio de ello porque tiene su propio trabajo como profesor en una universidad, así que solo desea que se puedan seguir grabando discos.

Ahora viene la parte interesante: por lo general cuando se hacen donaciones uno da sin recibir nada a cambio… en este caso no solo estaríamos teniendo beneficios simbólicos como los que expliqué más arriba, sino que hay una especie de menú para los donadores ¿Cómo es esto? Acá es donde se unen los nombres que mencioné al principio, ya que muchos de ellos y sus colegas han contribuido con ítems especiales para coleccionistas, que adquiriéndolos automáticamente pasan a estar contribuyendo con la causa, eso sí… ¡hay que apurarse porque son objetos preciados y la gente los compra enseguida!

De todas maneras el mensaje es claro. Estos artistas contribuyeron preservando esta gran familia como un deber, el deber de cuidar algo que fue creado en la década de los 70 en un sucucho de Londres bajo un lema que gritaba “No future” como una irónica burla hacia las trabas que ponen las grandes empresas o la dificultad de salir a delante en un mundo donde las adquisiciones monetarias pueden congelar los proyectos y sueños  de las minorías. Creando un grupo, una unión entre artistas que se ayudan entre sí, sin política, sin odio, ni mensajes discriminatorios, con el único objetivo de sacar adelante esta corriente que sigue viva aun 40 años después.


Entonces, si somos parte de esta cultura, hemos disfrutado esos temas, esos discos y creemos en lo que nos dicen esas letras, podemos ser parte de esa rueda de acción un poco oxidada y ayudar a que dé una vuelta más, para que al fin de cuentas no tengamos que decir nunca más Punk Rock is dead.